NOSTALGIA SPECTRUM
Historia, hardware y juegos del Spectrum 16K / 48K y Spectrum+

martes, 21 de febrero de 2012

HISTORIA. Sir Clive Sinclair (V)

La fijación de Clive Sinclair en el desarrollo de un ordenador que se pudiera vender por menos de cien libras se reafirma en mayo de 1979, cuando lee un artículo en Financial Times que estimaba un plazo de cinco años para que hubieran disponibles máquinas a ese precio. El inventor inglés consiguió ese objetivo en sólo ocho meses.
En enero de 1980 se presentaba el ZX80, en una exhibición en Wembley. Las espartanas capacidades de aquella máquina de noventa y nueve libras no tardaron en llamar la atención de decenas de interesados en la emergente informática personal que, en pocas horas, habían reservado el que seguramente sería su primer ordenador doméstico. Durante los nueve meses siguientes se habían vendido veinte mil unidades.
Incluso desde la perspectiva de aquel año, el ZX80 era una sencilla máquina cuya principal innovación era el precio. Lógicamente, sus limitaciones eran consecuencia de costar una quinta parte que las demás máquinas. Aquéllas eran perceptibles desde el primer contacto con la máquina; su característica externa más llamativa, aparte de su reducido tamaño, era el teclado, consistente en una sencilla - y poco duradera - membrana sensible al tacto. También llamaba la atención la falta del monitor; en su lugar, incluía una salida de radiofrecuencia para su conexión a un televisor corriente; como dispositivo de almacenamiento externo usaba cintas de casete de audio.
Sus caracterísiticas internas tampoco eran sobresalientes. La directiva de minimizar costes optimizando el diseño recayó sobre Jim Westwood, hombre de confianza de Sinclair, quien contó con personal que formó parte del proyecto NewBrain durante su etapa en Radionics, como Mike Wakefield. El resultado era una arquitectura de 8 bits basada en un microprocesador clónico del Z80 (NEC µPD780C, fabricado bajo licencia de Zilog, el creador del Z80), en vez de los 6502 de los Apple II o el obsoleto MK 14; lo que implicaba una alta capacidad de proceso, mal acompañada, sin embargo, de un único Kilobyte de memoria RAM - ampliable a 16 Kb con un módulo que a menudo provocaba reinicios espontáneos en la máquina - y la incapacidad de manejar aritmética en punto flotante o números de más de cinco cifras, consecuencia esto último de una limitada ROM de cuatro Kilobytes que contenía un limitado sistema operativo, el editor de programas y el intéprete BASIC de la máquina.

Aspecto externo del ZX80 (1980)

Aspecto interno del ZX80

El software del ZX80 había sido encargado a Nine Tiles Ltd, una compañía de Cambridge, que inicialmente propuso la utilización de Forth como lenguaje de programación por defecto, con más posibilidades para los usuarios avanzados. Pero Clive Sinclair deseaba una máquina cuyos propósitos fueran básicamente educacionales, para lo que encontraba el lenguaje BASIC mucho más adecuado. Nunca sabremos qué hubiera pasado si se hubiera seguido el consejo de los programadores de Nine Tiles, no obstante, considerando la gran influencia de las máquinas Sinclair en los años ochenta, el panorama actual de los lenguajes de programación podría ser bien distinto.
Una de las características más distintivas del BASIC de Sinclair es que las instrucciones tenían que ser introducidas a través de teclas asociadas, en vez de teclear su nombre tecla a tecla, como sucedía en el resto de los ordenadores . El efecto de esta singularidad, sólo previsto por Sinclair, fue el de animar a muchos profanos en programación a su primer acercamiento a este arte a través del ZX80; del que, sumando todos sus pros y sus contras, se llegaron a vender más de cincuenta mil unidades, por lo que un digno sucesor no tardaría en llegar. Mientras tanto, la compañía sufriría sucesivos cambios de nombre, a Sinclair Computers Limited y a Sinclair Research Limited.

Clive Sinclair (derecha) en la promoción del ZX80

El diseño del ZX81 se centraría en la optimización de la electrónica del aparato, mediante la mejora de la ROM, cuya capacidad sería duplicada y la sustitución de dieciocho chips por uno solo de diseño propio. La fabricaión de este chip, denominado ULA o Uncommited Logic Array, sería encargado a Ferranti, una importante compañía del sector. Este chip también se usaría en los ZX Spectrum. Los propietarios de un ZX80 podían actualizar su máquina mediante la adquisición de la nueva ROM, que ya posibilitaba el uso de coma flotante y nuevas instrucciones en el Sinclair BASIC. Aparte de aquello, la única mejora del ZX81 respecto a la anterior máquina era la gestión de vídeo, realizada vía hardware, que también sería en blanco y negro. El refresco de vídeo en los ZX80 se realizaba exclusivamente en los tiempos de inactividad del sistema, lo que producía un molesto tintineo en la pantalla cuando se pulsaban teclas o mientras se ejecutaban programas con cierta carga computacional.

El Sinclair ZX81  (1981)

Las ventas del ZX81 rápidamente superaron a las de su antecesor, traspasando fronteras para entrar en mercados extranjeros, motivo por el cual el apellido Sinclair se hacía un hueco en los mentideros de la sociedad británica. La prensa, no sólo la especializada, hablaba de su persona, convirtiéndolo en un personaje público cercano al que apodaría "tío Clive". Ya habitual en las caricaturas de la prensa nacional, se había convertido en un personaje carismático que cualquier británico podía reconocer; confirmándolo en su recién adquirida condición de icono de la informática que, sin duda, aprovecharía para promocionar sus productos.
Sus virtudes como modelo de empresario británico, que por entonces se aventura en el terreno editorial fundando Sinclair Browne Ltd, se refuerzan con sus últimos logros personales, destacando la presidencia de la Mensa Británica, asociación de personas con alto cociente intelectual de la que era miembro desde 1959, a la que había accedido en noviembre de 1980. Nuevos galardones llegarían años después, incluyendo el título de caballero británico, otorgado por mediación de Margaret Thatcher en un movimiento no falto de connotaciones populistas.